Los sueños de Platini

Tiro Penal
Los sueños de Platini
Por Miguel Guilarte

Fútbol sin riqueza. El francés Michel Platini, es tan buen soñador
así como fue un gran jugador. El ex volante de la Juventus y la selección nacional de Francia, acaba de editorializar en la revista de la UEFA que “en el fútbol no hay lugar para los que quieran enriquecerse”. Entiendo que Platini quiera cambiar un poco la mentalidad de los dirigentes europeos y sobre todo los grandes empresarios del fútbol sobre los que giran una gran cantidad de millones, pero pretender modificar los motivos económicos del multimillonario mercado de jugadores y todo el negocio que rodea al mundo del fútbol es una tarea muy cuesta arriba...

Millones y más millones. En el fútbol, como en la vida, todo gira alrededor del dinero porque el fútbol es un negocio del que todos sacamos provecho. Quizás los más inocentes de todo esto sean los mismos jugadores cuando dan sus primeros pasos en este deporte, no imaginando nunca que en el futuro sus destinos se decidirán en mesas de negociaciones, entre padres —que últimamente fungen mucho de agentes— representantes y dueños de equipos, quienes ponen precios a las piernas y virtudes de un jugador...
Muchos ejemplos. Cada día son más jóvenes los jugadores que son reclutados de las canteras de los grandes equipos sudamericanos —leáse Boca Juniors y River Plate por ejemplo en Argentina— para ser asegurados por los grandes equipos de Europa, quienes al contrario de lo que imagina Platini, lo que están pensando es en los enormes beneficios económicos que esos jugadores les traerán en el futuro”...

A todo nivel. Y no es sólo a nivel del Real Madrid y el Barcelona en España, el Chelsea, el Manchester United y el Arsenal en Inglaterra y el Milan, el Inter, Roma a la Juve en Italia. No. Si vamos a un plano más terrenal vemos “negocios” en todas la ligas, copas y copitas que se organizan en cualquier categoría a nivel mundial., siendo los jugadores los que llevan la peor parte, o si no pregúntele a Diego Maradona, que después de ser una estrella que lo ganó —y perdió— todo en el fútbol, ahora tiene que recorrer el mundo con una pila de “viejitos” como él para tratar de recuperar su fortuna con el Showbol...
La MLS. En nuestro entorno tenemos un buen ejemplo de lo que es hacer un “buen negocio” con el fútbol como objeto y malo a la vez para el progreso del deporte, que es al fin y al cabo lo que a una Liga en desarrollo como la MLS le debería interesar. Aún sin haberse recuperado de las millonarias perdidas que arrastra desde su fundación, la Liga —amparada en los patrocinantes— contrató a David Beckham por más de 250 millones de dólares para que venga aquí a vejetar.