Thursday, December 28, 2006

Tiro Penal - Un tiro de gracia.


Un tiro de gracia
Por Miguel Guilarte

Adiós a Peter Nowak. La salida de Peter Nowak de la dirección técnica del D.C. United es el mejor regalo de fin de año que se le pudo dar a jugadores y aficionados y abre otra vez las puertas para la llegada de jugadores centroamericanos y latinoamericanos en general (no sólo argentinos) al club, ampliamente marginados en la era de Nowak...

Tiro de gracia a la selección. Cuando hace unas pocas semanas Ricardo Mayorga comentó en su columna De Frente que Nowak era uno de los candidatos para dirigir la selección nacional de EE.UU., pensé que eso no tenía ningún sentido si se tomaba en consideración que los verdaderos candidatos eran el alemán Jürgen Klinsmann y el argentino José Pekerman. Cualquiera de los dos hubiese sido un cheque al portador para un futuro más alentador para la Copa Oro y la Copa América a celebrarse en los próximos meses en EE.UU. y Venezuela, las eliminatorias mundialistas y el Mundial de Sudáfrica 2010, pero el elegido fue Bob Bradley quien ahora llamó a Nowak…

Las sorpresas. Ya estaba sorprendido y hasta pesimista por la contratación “interina” de Bob Bradley. La sorpresa fue mayor cuando me enteré que Nowak había salido del United para ser asistente de la selección Sub-23 y de Bradley en el equipo de mayores. No hay que restar méritos al hecho de que Nowak en su año de técnico debutante llevó al United a lograr su cuarta copa en la Liga, pero la MLS es la MLS y la selección es la selección, donde no se trata de competir a nivel de clubes en una liga de segundo nivel, sino que debe enfrentar a seleccionados como México en la Copa Oro, y a Argentina y Brasil en Venezuela…

Lo mejor. La Federación de EE.UU. dijo que Bradley es interino y en caso de que nombren a otro técnico, él pasará al equipo olímpico con Nowak a su lado. Por el bien del fútbol en este país, que merece otra oportunidad para mejorar, ojalá que venga un técnico reconocido al combinado de adultos y Bradley se vaya con Nowak a la Sub-23. Para EE.UU. sería mejor no asistir al fútbol de los Olímpicos que no clasificar al Mundial 2010. Feliz Año 2007.

miguel@eltiempolatino.com

Tuesday, December 12, 2006

Tiro Penal - Sin pena ni gloria

ADIÓS. Nowak saluda a Adu al sacarlo de su último partido con el D.C.


-Finaliza la espera en D.C. Cuando en el 2003 la MLS anunció la contratación del joven atacante de origen ghanés, Freddy Adu, y su asignación al D.C. United, hubo diferentes reacciones en esta capital. Algunos aficionados se alegraron porque de alguna manera pensaron que el joven podría contribuir a terminar con la sequía de títulos del club en las últimas cuatro temporadas; otros se conformaban con el hecho de verlo en acción a nivel profesional después de sus éxitos en las categorías menores, en tanto que la MLS y el D.C. United pensaron que habían ganado la partida a clubes como el Manchester United, Milan, Chelsea, PSV Eindhoven y Real Madrid que habían manifestado su interés en el joven jugador. Tres años después, cuando seguíamos esperando por esos resultados, Freddy se marcha al Real Salt Lake, en vez del Real Madrid...

Los errores. Es cierto que la MLS y el fútbol de EE.UU. tienen derecho a crecer, pero también es verdad que las mejores ligas se construyen a fuerza de talento y trabajo en las canteras y no a fuerza de billetes como pretendió la MLS en el caso de Adu. Pagar $500 mil a un joven de 14 años sólo por lo que había hecho en dos mundiales de categorías inferiores nos pareció un exhabrusto en aquella oportunidad, sobre todo porque hay muchos jugadores consagrados que han ayudado a consolidar la Liga y de probado rendimiento en el fútbol de este país que no ganan ni la cuarta parte de lo que se estaba asignando a Adu. Los únicos que salieron ganando fueron los miles de niños que se pasearon por el RFK en las últimas tres temporadas, muchos de ellos sin tener la menor idea de quién era Freddy Adu, pero atendiendo a los múltiples compromisos publicitarios de promoción del joven talento que la Liga obviamente necesitaba para pagar sus honorarios, aspecto que lograron el primer año al llenar de aficionados todos los estadios donde se presentó Adu con el D.C. United...

United pero no Manchester. Adu fue asignado al D.C. United por petición del propio jugador quien, según dijo la Liga, puso como condición jugar con el club de la capital al que había seguido desde que llegó a vivir en Bethesda, Maryland. Luego fue puesto bajo la tutoría de Peter Nowak, quien fue un buen jugador en la MLS pero que como técnico ha dejado mucho que desear y quien no dio a Adu las oportunidades que él y todos los aficionados esperaban para ver en acción a un jugador que a los 14 años ya costaba medio millón de dólares. Para eso hubiese sido mejor que lo hubieran dejado ir a Italia, España o Inglaterrra. No es lo mismo jugar “banco” en el A.C. Milán o el Manchester United que hacerlo en un club de la MLS.

Muchas concesiones. Es verdad que al pasar al Real Salt Lake Adu continúa en la MLS pero su salida del United en cierta forma hace justicia con los demás clubes de la Liga. De acuerdo a las condiciones de la MLS los jóvenes jugadores deben participar en el sorteo anual para ser seleccionados, teniendo la primera opción el equipo que concluya con el peor récord la temporada anterior. Esa regla fue obviada en el 2003 y los dirigentes de la Liga aceptaron las condiciones de Freddy...

Una palmadita. Adu en cierta forma fue paciente en sus dos primeros años y aunque con poca acción ayudó al club a ganar su cuarta corona en el 2004, sin embargo, a finales de la temporada del 2005 hizo unos comentarios públicos en contra del poco tiempo de acción que le daba Nowak, diciendo inclusive que por esa razón el ex seleccionador, Bruce Arena, no lo convocaría a la Copa del Mundo Alemania 2006. Adu fue suspendido por el juego de playoffs del 21 de octubre del 2005 pero su verdadereo castigo me parece que llegó un año después. El 5 de noviembre pasado, en la final de la Conferencia Este, entre el United y el Revolution, Adu jugaba uno de sus mejores partidos en Washington y tenía una clara visión de gol. D.C. United perdía 1-0 y faltando 25 minutos para el final, Nowak lo sustituyó —ante el asombro de todos— por el argentino Matías Donnet y como si nada le dio una palmadita a Adu al salir del terreno, quizás ya sabiendo que ese sería su último partido con el D.C. United.

miguel@eltiempolatino.com